Sigue el viaje del velero Piropo, con sus tripulantes Dani y Sandra, en su pretendido deseo de dar la vuelta al mundo por los trópicos.

Diario de a bordo

Todos los apuntes de septiembre, 2012

VENEZUELA (4ª PARTE): Últimos días de estancia en Puerto de la Cruz, vista a España y arreglos en el varadero. Del 10 de julio al 27 de septiembre de 2012.

  Ya lo tenemos todo listo, agua, gas gasoil, gasolina y mucha comida. Todo preparado para pasarnos el máximo tiempo posible en las maravillosas y casi deshabitadas islas que vienen por delante: Isla Tortuga, Archipiélago de los Roques y Archipiélago

VENEZUELA (3ª PARTE): Visita a Mérida y los Llanos. Del 30 de junio al 10 de julio de 2012.

  Partimos de la ajetreada estación de autobuses de Ciudad Bolivar a las siete y media de la tarde de ese día. Por delante teníamos muchas horas de autobús hasta Barinas cruzando casi toda Venezuela. Desde allí, debíamos coger otro

VENEZUELA (2ª PARTE): Visita al Salto del Ãngel, Canaima y Ciudad Bolivar. Del 25 de junio al 30 de junio de 2012.

  Nos encaminábamos felices ese lunes hacia la salida de la marina. Íbamos con todo dispuesto para disfrutar de unos días de turismo por un lugar que teníamos muchas ganas de conocer: el Salto del Ángel, la cascada más alta

VENEZUELA (1ª PARTE): Travesía de La Blanquilla a Puerto de la Cruz y días de estancia en esta ciudad y Caracas. Del 26 de mayo al 24 de junio de 2012.

  Después de más de seis meses fondeados sin que el Piropo hubiera tocado puerto, navegábamos ahora hacia una marina situada en Puerto de la Cruz, una ciudad al este de la Venezuela continental. Lejos quedaba la marina de La

TRAVESÃA DEL MAR CARIBE Y ESTANCIA EN LA BLANQUILLA: Travesía de Baie de Marigot (Saint Martin) a Playa del Yaque en la Isla de La Blanquilla (Venezuela) y días de estancia en esta isla. Del 16 al 25 de mayo de 2012.

  Casi cuatrocientas millas era la distancia que habríamos de recorrer para realizar la travesía que teníamos prevista y que nos llevaría de la isla de Saint Martin a la isla de La Blanquilla, en Venezuela. La navegación que teníamos